Con cerca de 420.000 toneladas, la producción de acero crudo tuvo una suba del 22% en agosto con respecto a julio; comparado con el mismo mes del año anterior, representó una caída del 7,5%. Esta recuperación parcial corresponde a la normalización de la actividad tras el conflicto gremial, que afectó también la provisión a la cadena de valor metalmecánica y la construcción.

En cuanto a los productos laminados, la suba intermensual fue del 15%, mientras que la interanual representó una caída del 7,1%, de acuerdo al reporte de la Cámara Argentina del Acero.

En cuanto a la actividad sectorial:

  • El sector de la construcción mantiene nivel. Los despachos de cemento crecieron 13,3% con respecto a julio, en comparación con el mismo mes del año anterior se observa una disminución del 1,6% y baja 0,9% el acumulado anual.
  • El sector automotriz tuvo una suba intermensual en la producción de agosto del 28,8%. Comparado con el mismo mes del año anterior, la producción creció un 17,4%. Las exportaciones subieron un 0,7% con respecto a julio y tuvieron una baja del 11,1% respecto al mismo mes del 2022.
  • Maquinaria e implementos agrícolas aún no muestra signos de recuperación debido a los efectos de la fuerte sequía, lo que se refleja en las estadísticas de producción y en las ventas de acero al sector.
  • El sector de la energía mantiene un buen nivel de operación y perspectivas de ligero incremento a futuro por ampliación de la capacidad de transporte de hidrocarburos.
  • En el mercado de consumo masivo, los despachos a fabricantes de electrodomésticos se sostienen en el mismo nivel impulsados por los planes de venta en cuotas. El sector de envases continua con buen nivel de actividad.

Importación de insumos y productos semielaborados importados

Continúan las dificultades para el acceso al MULC para importación de materias primas no producidas en el país, así como para la importación de productos semielaborados e insumos y repuestos necesarios en el ciclo productivo.

Por otro lado, permanecen las dificultades para obtener las aprobaciones para el pago de fletes y servicios mediante las SIRASE. Esto ocurre tanto para insumos importados por las acerías como también por sus proveedores. Debido a esto, la situación se torna crítica respecto de algunos repuestos imprescindibles que podrían poner en riesgo las instalaciones.