(Por redacción País Productivo) Sin dudas, es un número que celebra el Gobierno nacional, ya que, a pesar del tímido aumento que tuvo el dólar tras el fin del cepo cambiario y el establecimiento de un sistema de flotación entre bandas, la inflación se desaceleró en abril.
Según informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el Índice de Precios al Consumidor (IPC) se ubicó en el 2,8%, lo que implicó la caída de 0,9 puntos porcentuales respecto al 3,7% de marzo.

Así, la inflación acumulada en los primeros cuatro meses del año se ubicó en 11,6% y la interanual en 47,3%, detalló el organismo público.
A nivel de las categorías, los bienes y servicios en el IPC Núcleo lideraron el incremento, con una suba del 3,2%, seguidos de los precios estacionales, con el 1,9% y los regulados, con el 1,8%.
No obstante la desaceleración respecto a marzo, abril registró el segundo mayor incremento del año y también el segundo mayor desde octubre.

El segmento que tuvo el mayor avance fue el de «restaurantes y hoteles», con el 4,1% y «recreación y cultura», con el 4%, seguido por «prendas de vestir y calzado», con el 3,8%.
Por su parte, «alimentos y bebidas no alcohólicas» subió 2,9% y tuvo la mayor injerencia en el alza mensual, mientras que «bebidas alcohólicas y tabaco» registraron un incremento del 2,8%, al igual que «comunicación».
Por debajo del índice general se ubicaron «bienes y servicios varios», «salud» y «educación», con el 2,5%, seguido por «vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles», con el 1,9%; «transporte», con el 1,7% y «equipamiento y mantenimiento del hogar», con el 0,9%.