(Por redacción País Productivo) Después de que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informara un déficit de US$ 5.000 millones en la cuenta corriente en el primer trimestre del año, el ministro de Economía, Luis Caputo, justificó los números en rojo y sostuvo que es «comprensible» que esto suceda en una economía en «crecimiento».

“Es algo absolutamente razonable y hasta sano para una economía que está creciendo al 6%”, dijo Caputo hoy durante su participación en el congreso Somos Pymes, que se está llevando a cabo en La Rural.

En este sentido, marcó que “es algo absolutamente razonable para un país que estaba totalmente descapitalizado y donde está creciendo al 31,8%, era obvio que iba a pasar esto. No es que no le prestamos atención, pero hago esta explicación para que entiendan y no se dejen seguir engañando por gente que no entiende o tiene otros objetivos”.

Pero otro punto que subrayó el titular del Palacio de Hacienda fue que «ese déficit ya no financia más el rojo del sector público, sino que es déficit del sector privado”.

Dólar y devaluación

En otro tramo de su exposición, Caputo volvió a descartar una devaluación, defendió el esquema cambiario actual, rechazó que el peso este sobrevaluado y pidió al sector «cambiar el chip».

“El tipo de cambio flota. Si a cualquiera le parece que está barato, puede ir y comprar”, dijo.

Por otro lado, destacó que «hasta hace 18 meses, el negocio era sobrestockearse y esperar porque una devaluación iba a poder fijar el precio en cualquier lado, y se lo iban a convalidar porque no había referencias. Y se convalidaban negocios que no funcionaban bien”.

“Ese es el cambio de modelo. Vamos a bajar impuestos, desregular y abrir paulatinamente la competencia, para que se pueda beneficiar la gente con bienes de mejor calidad a mejor precio. Eso es lo que estamos haciendo. Hay que pensar en ser eficiente e invertir. Hace mucho que en este país no se invierte, y por décadas se pensó en lo financiero y no en lo comercial. Ese clic no va a pasar de un día para el otro. Es un proceso duro, pero el camino es único”, concluyó.