(por Christian Veltri) Los dólares son escasos como agua en el desierto pero tan necesarios como un oasis en el Sahara. En medio de la crisis del turismo, que muestran números flacos del receptivo y altísimos del emisivo al extranjero, y en baja las visitas internas, las ciudades y provincias más emblemáticas del turismo argentino lanzan sus temporadas invernales buscando un poco de esa gota de agua llamada dólar.

Las principales ciudades turísticas del país salieron a la caza de los dólares que puedan dejarle los turistas – nacionales y extranjeros – para pasar la época de frío y lanzaron su temporada invernal con variadas estrategias de captación y seducción. 

El emblema del turismo invernal argentino es “nieve y montaña”. En esta temática picó en punta Bariloche. La ciudad ícono del turismo de la Patagonia Argentina mostró entre sus puntos más salientes que este invierno tendrá conectividad aérea récord esperando más de 220 vuelos desde Brasil y Chile, junto al aumento de las frecuencias de Aerolíneas Argentinas desde distintas ciudades del país. Además, relanzaron el “Bariloche Sale”, con descuentos de hasta 40% en alojamiento, gastronomía y comercios; y los Precios Congelados, que mantiene valores 2024 de algunos servicios clave.  

La provincia de Rio Negro dijo presente con sus ciudades de nieve y mar como la mencionada Bariloche (que hizo su propia presentación), El Bolsón con su comunidad de artesanos y amantes de la vida en naturaleza, Las Grutas con sus playas mágicas en verano que mantienen esa belleza también en invierno, o San Antonio Oeste como lugar para cultivar la tranquilidad y la buena pesca, o los paisajes del camino de la Ruta 40 sur y el Tren Patagónico que une Viedma y Bariloche.

Tierra del Fuego y su “invierno en el Fin del Mundo” tienen como característica una temporada que se extiende hasta finales de septiembre. Desde el INFUETUR expusieron que “está garantizada la conectividad aérea, con 12 vuelos diarios (9 de Aerolíneas Argentinas, más Jetsmart y FlyBondi) que conectan Buenos Aires y Córdoba, sumando 2 vuelos semanales desde San Pablo, Brasil. El destino ofrece una variedad de actividades para toda la familia, como esquí, travesías 4×4, o el “Tren del Fin del Mundo”.

Neuquén hizo su presentación en Buenos Aires mostrando una variedad de servicios recreativos y centros de esquí en San Martín de los Andes, Villa La Angostura, Caviahue-Copahue y Villa Pehuenia. Aerolíneas Argentinas confirmó 40 frecuencias semanales al aeropuerto de la capital neuquina más 25 al aeropuerto de Chapelco, que abastece de turistas a San Martín de los Andes y Junín de los Andes. 

Mendoza apuesta a un turismo que mezcla deporte y naturaleza, con su clásica ruta del vino para visitar o sus centros de esquí en la ciudad de Malargüe. “Se podrá disfrutar desde el Valle de las Leñas, uno de los centros de esquí más importantes de Sudamérica, El Azufre que es un nuevo emprendimiento que está en construcción y sorprende con su oferta turística, o el Real del Pehuenche, un lugar espectacular para los turistas que visitan el destino. La naturaleza nos ha dado bellezas espectaculares y que se pueden disfrutar todo el año”, comentó el intendente Celos Jaque en el lanzamiento.

Saliendo de las montañas y el esquí, la oferta también es muy variada. 

La Ciudad de Buenos Aires apuesta a una agenda turística para porteños y visitantes combinando aire libre, cultura y entretenimiento. Un abanico de museos para todos los gustos (desde ciencias naturales hasta arte), espectáculos de teatro para todas las edades con la Av. Corrientes – “la calle que nunca duerme” – como emblema de la noche porteña, o sus parques al aire libre con distintas propuestas. En resumen, una ciudad dinámica y diversa con más de 7000 locales gastronómicos, 280 teatros, 150 museos y 300 librerías, hay oferta para todos los gustos.

Con el slogan “Vení a disfrutar del sol del invierno a Córdoba”, la provincia presentó su oferta turística centrada en actividades culturales, recreativas, gastronómicas y deportivas con más de 150 actividades en distintas ciudades de la provincia.

Apuntando al norte del país, La Rioja apostó fuerte a una experiencia auténtica basada en cultura y sabores autóctonos. El secretario de Turismo provincial José Rosa, enfatizó en el compromiso del gobierno provincial por consolidar al turismo como política de estado, apuntalado en el crecimiento de la infraestructura en sus 18 departamentos y en el trabajo con productores locales, artesanos y emprendedores gastronómicos, destacándose el lanzamiento de “la Ruta del Vino Riojano” y “la Ruta del Olivo” como nuevos circuitos turísticos.

La provincia de Jujuy también presentó su temporada con base en la gastronomía y la cultura local; mostrando la oferta provincial en sus cuatro regiones pasando por la Puna, las Yungas, los Valles y hasta la Quebrada de Humahuaca.  

Destinos menos tradicionales también apuntan a potenciar el turismo en sus regiones. 

Entre Ríos y su “#ModoCarpincho” apunta a desconectarse del estrés y conectar con la esencia de la vida, paisaje, cultura y actividades que renueven el espíritu. La provincia resalta como principal atractivo sus termas, el circuito histórico de museos que muestran la cuna del federalismo del país, o los ríos Paraná, Uruguay y Gualeguay para el turismo de naturaleza.

Provincias como La Pampa, que se presenta como un destino nuevo y emergente, Corrientes que mira a un turismo de todo el año a través de sus atractivos naturales, o Tucumán y su turismo histórico, tienen el desafío de posicionarse en el circo de las ofertas invernales para los turistas propios y extranjeros que quieren recorrer el país. 

Estas son algunas opciones que ofrece Argentina en materia de geografía para el turismo. Pero con una economía que sigue siendo cara en dólares favorecida por un tipo de cambio para viajar y consumir en el exterior, el desafío para la industria del turismo nacional de mostrarse competitiva y atraer al público será titánica.