(por Christian Veltri) La Ciudad de Buenos Aires abre al público del Mirador Obelisco por primera vez en sus 89 años de historia. Dentro del Obelisco se instaló un ascensor vidriado que permitirá el ascenso y descenso en grupos de cuatro personas, que disfrutarán de una vista panorámica de la Ciudad. Cuánto cuesta la experiencia, cuánto costó la obra, quién lo explota.

La Ciudad de Buenos Aires tiene muchos monumentos históricos, pero su emblema central es el Obelisco. Emplazado en la Plaza de la República, en Corrientes y 9 de Julio, el mirador de su cúpula detenta una vista panorámica privilegiada de la ciudad ya que su mirador ofrece vistas hacia los 4 puntos cardinales.

El monumento fue construido el 23 de mayo de 1936 por el arquitecto Alberto Prebisch (que construirá en 1937 lo que se consideró el ícono de su obra, el Teatro Gran Rex). Homenajea el cuarto centenario de la primera fundación de Buenos Aires por Pedro de Mendoza, y se construyó en el lugar donde se izó por primera vez la bandera argentina en la Ciudad.

El Obelisco es un clásico monumento pétreo con forma de pilar, con cuatro caras iguales y rematado en su extremo por un piramidón. Es un tipo de monumento clásico muy usado en el Antiguo Egipto. Se construían en un único bloque de piedra y se colocaban en pares en las entradas de los templos de los dioses egipcios, a muchos de ellos se los puede ver hoy en distintos museos y ciudades del mundo como por ejemplo el de Ramsés II, en donde uno de ellos se encuentra en el Templo de Luxor, y su pareja en la Plaza de la Concorde de París.

Posteriormente, muchos países utilizaron esta forma de monumento con carácter conmemorativo, elaborándolos a imitación de los usados en el Antiguo Egipto, conservando su formación pétrea pero de distintas alturas. Ejemplos hay alrededor del mundo, como el Monumento a Washington en Columbia, EE.UU.

El Obelisco de Buenos Aires tiene una base de 6,8 mts por lado, una altura de 67,5 mts y un peso aproximado de 170 toneladas. Su construcción, que costó $200.000 pesos moneda nacional, estuvo a cargo del consorcio alemán GEOPÉ, inició en marzo de 1936 y tardó solo 1 mes, participaron 157 operarios, se usaron 680 mts3 de cemento y 1360 mts2 de cuarzo extraído de Pampa de Olán, Córdoba. Fue inaugurado el 23 de mayo de 1936.

A partir de hoy, la Ciudad de Buenos Aires abre al público el Mirador Obelisco por primera vez en sus 89 años.

Dentro del Obelisco se instaló un ascensor vidriado que permitirá el ascenso y descenso en grupos de cuatro personas, los que disfrutarán de una vista panorámica de la Ciudad desde la cima del Obelisco en turnos rotativos de 15 minutos. Todas las obras se realizaron preservando la estructura original del Obelisco, lo que garantiza su protección como Monumento Histórico Nacional, informaron desde el Gobierno porteño.

En agosto pasado se adjudicó la licitación para la prestación de los servicios del Mirador Obelisco a la Unión Transitoria Autotransporte Andesmar, conformada por las empresas mendocinas Autotransporte Andesmar SA y Da Fre Obras Civiles SA.

La concesión fue otorgada por un plazo de cinco años, con un canon mensual de $ 26,1 millones, que permitirá que la Ciudad recupere la inversión realizada para el proyecto.

La tarifa para ascender al Mirador Obelisco será de $36.000 para extranjeros, y de $18.000 residentes argentinos con acreditación de documento (jubilados y niños entre 4 y 11 años 50% de la tarifa y menores de 4 años gratis); el monumento abrirá al público todos los días de 9 a 17 hs.

La experiencia que cuenta con un ascensor (con una cara vidriada para mirar hacia adentro del Obelisco) que te lleva en 1 minuto hasta 55 mts, completando el ascenso con una escalera caracol de 35 peldaños hasta el mirador. A través de 4 ventanas orientadas hacia los puntos cardinales, se observa una panorámica de la Ciudad de Buenos Aires. La experiencia dura unos 20 minutos y se complementa con una narración histórica y cultural.

 Anteriormente, el ascenso se podía realizar a través de una escalera marinera de 206 escalones, y se realizaban de manera gratuita, organizando las visitas por sorteo para residentes de CABA. Con el cambio de gestión, el actual gobierno de Jorge Macri, lleva adelante la política de concesionar espacios públicos con fines turísticos y comerciales.

El turismo en CABA enfrenta una caída mes a mes. El turismo internacional en agosto 2025 (último mes relevado por el Observatorio Turístico de CABA) fue de 185 mil visitantes, acumulando en el año 1.545.000, una caída interanual de 18% en ambos valores, el gasto total acumulado en el año es de U$S 647 millones, una caída interanual de 5%.

Según la Encuesta de Ocupación Hotelera (EOH) publicada por el Observatorio Turístico de la Ciudad de Buenos Aires, los hoteles y lugares de alojamiento turísticos de CABA facturaron entre enero y julio (última fecha relevada hasta hoy) de 2025 $287690 millones, cayendo alrededor de 3% interanual respecto a los $295.897 millones del mismo período 2024.

Si a esta caída le sumamos la inflación interanual en el rubro hotelería informada por INDEC a julio 2025 fue de 54,6 % esa caída se transforma en algo mucho más significativo dentro de la crisis turística.

Y como muestra de la crisis el reflejo es el empleo hotelero, que para julio 2025 rondaba en los 63450 puestos de trabajo, pero que en el mismo mes de 2024 tenía casi un 40% más de puestos de trabajo, dándole empleo a 88580 personas en CABA.